sábado, 27 de noviembre de 2010

La Jugueteria del Cocinero

Se dice que no hay mejor sitio para conocer un lugar que la plaza de mercado, algo asi como abrir la nevera en casa ajena y ver que desayunan, que guardaron de ayer, que tanta abundancia o escaces hay ó que aberraciones o descubrimientos culinarios se esconden de los invitados.
Afortunadamente medellín tiene varias neveras donde esculcar, entre ellas la central mayorista, la plaza minorista, la placita de flores, la de la america y la de campo valdes, cada una con sus particularidades y atracciones.
Cual conquistador en el nuevo mundo, la plaza es como estar en una gran jugueteria, con la billetera del papa despues de quincena, en la mayorista a las tres de la madrugada uno se siente como un verdadero niño, antojado sin saber por que decidirce y cada vez encontrando algo mejor que lo anterior.

 Mientras la mayoria de la ciudad se acosto y duerme, alli se prenden luces y fogones, todo el mundo anda de aquí palla y uno enbobado por la cantidad y la variedad de todo, todo fresco, no por libras ni kilos, si no por montañas y camiones, donde uno se pare estorba, alli se olvida facilmente que hay hambre en el mundo, alli uno se siente como Bourdain o el otro gordito pruebalo todo de la television, alli lejos de la luz blanca, superficies quirurjicas y orden ezquizofrenico de los supermercados, lejos del acero inoxidable de las cocinas, alli donde la mercancia, se puede tocar, oler y hasta comer, donde dan encima, ñapa o ajuste, donde el olor de las verduras aun esta impregnado del rocio de la montaña, alli donde se sabe que en unas cuantas horas las calles, las legumbrerias, las tiendas, los supermercados, estaran inundadas de tal fruta o cual verdura, que luego estara en el almuerzo  de julanito en la casa y sutanito en el trabajo o que mañana la ciudad estara repleta de jugo de tal cosa o todo el mundo su pedazo de aguacate, alli se sabe que a los paisas les gusta la arepa, el cilantro y la cebolla de rama, platanos verdes y mangos por montones, biches, maduros, buenos y malucos, amarillos, verdes, rojos, bananos, papas,  encurtidos y ajies entre quesitos de hoja y mostaza para los pajaros.
Alli se acuerda uno que la cocina es cultura, que de verdad somos lo que comemos y que en la plaza nos encontramos todos los dias, en tu casa, en el restaurante, en el almuerzo o la comida.

No hay comentarios:

Publicar un comentario